Un horizonte esperanzador

La calurosa recepción del número inicial de la revista superó nuestras expectativas y confirmó la necesidad de que los profesionales y los estudiantes contáramos con un medio para la difusión del pensamiento y la praxis artete­rapéutica. Esta bienvenida proveniente de diversas partes del mundo, y en particular de Latinoamérica, reafirmó la convicción de que la identidad de nuestra práctica requiere una reflexión más allá de las fronteras de un país. Se ancla en la otredad como piedra angular de una edificación compartida y en vinculación con otras profesiones.

La traducción al español del término Art Therapy, que es “Arteterapia”, está empezando a sonar con distinto tenor en diversos ámbitos y países de la región. Por este moti­vo, nos pareció iluminador que este número contara con un registro de la historia del arteterapia en países como Argentina, Brasil, Colombia, Chile, El Salvador, Perú y Uru­guay. Al respecto, el artículo que integra la sección “Ha­ciendo foco” se vincula con un principio que coincide con nuestra línea editorial: plantea pensar nuestra identidad en un mundo globalizado donde se imbrican experiencias de países en los que el arteterapia se desarrolló durante mucho tiempo, con otras más novedosas –las regionales– con la consciencia de que tenemos muchas contribuciones para compartir con la comunidad mundial de arteterapia.

En este punto queremos hacer una adenda y comentar un hecho que nos llena de esperanza: el avance parla­mentario, pausado pero seguro, de un proyecto de ley que reglamenta la profesión del arteterapeuta en Brasil (3416/2015) y que será motivo de un análisis pormenori­zado en nuestra edición de diciembre.

Diversas secciones se incorporaron a la revista y confor­marán su estructura futura. En “Caleidoscopio de lengua­jes” mostramos la diversidad de expresiones creativas que configuran el arteterapia, en un rico interjuego de la díada del todo y las partes. En otras palabras, para pensar nuestro quehacer estamos convencidos de la pertinencia del principio hologramático del paradigma de la compleji­dad de Edgar Morin, que plantea superar el holismo que ve exclusivamente el todo y el reduccionismo que solo fo­caliza en las partes.

“Experiencias arteterapéuticas” está compuesta por la contribución de profesionales de diversas partes del mun­do que nos cuentan acerca de su trabajo con diferentes poblaciones y ámbitos. Esta sección es un canal abierto y una invitación a quienes deseen reflexionar y/o compartir sus experiencias.

La entrevista de “Encuentros conversados” es una convo­catoria a profesionales de diversas disciplinas vinculadas al arte, así como filósofos, psicólogos, epistemólogos o sociólogos, entre otros. Todos pueden nutrir conceptual­mente nuestro quehacer. Creemos además que los artis­tas pueden brindar su particular reflexión sobre el proceso creativo, de modo que también integrarán este apartado.

“En profundidad” fue pensada para dar a conocer las in­vestigaciones que se efectúan en arteterapia. Conscientes de que la identidad y consolidación del marco conceptual del arteterapia se realizan con el aporte complementario de conclusiones convalidadas en procesos de investiga­ción, presentamos esta sección que también estará abier­ta al aporte de los profesionales que deseen participar.

Continuamos con tres secciones que ofrecimos en el pri­mer número. Nos referimos a “De libros y autores”, que incluye ediciones que consideramos de lectura recomen­dada para quienes trabajan en arteterapia; “Agenda de Congresos y Encuentros”, que pretende ser un convite a armar una agenda con tiempo para presentar trabajos y darlos a conocer (en esta edición hemos sumado a los congresos de arteterapia aquellos vinculados a otros lenguajes creativos); y “Arteterapeutas en acción”, en la que varios profesionales relatan en primera persona sus ex­periencias en cuanto a inserción laboral en distintos ámbitos, a partir de ítems proporcionados por la revista.

“Paleta de lenguajes arteterapéuticos” nació como una convocatoria en el número anterior a que los profesionales dieran a conocer sus obras artísticas. Este apartado fue diseñado desde el convencimiento de que un arteterapeuta debe indagar no solo en lo que sucede en su propio proceso de creación, sino también en las posibilidades y limitaciones que ofrecen diversos materiales. Agrade­cemos a todos aquellos que nos enviaron sus obras para compartirlas con ustedes.

Resta solo invitarlos a leer la revista y a participar de las próximas ediciones.